Tzara siempre insistió en la implicación física del artista y su relación con el público: Performance
Se presentaba vestido con frac, sobrio, impecable, de gala, muy serio, manifestando que tenía todo el derecho de orinar en diferentes colores, sacaba su pene y lo exhibía, luego meneaba su trasero como si fuese el vientre de una bailarina oriental, al instante se iba desvistiendo hasta quedarse completamente desnudo, mientras producía un sonido como de cerdos salvajes que iba increscendo, oinkkkkkkk oinkkkkkkkkk, para luego insultar al público y generando así cada vez más un clima de violencia.
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